jueves, 31 de enero de 2013

En el país de la nube blanca


 En el país de la nube blanca, de Sarah Lark, es el primer libro de una trilogía ambientada en Nueva Zelanda. La historia muestra la vida de dos muchachas que emigran a este país desde Inglaterra. Dos clases diferentes, dos vidas que en nada tienen que ver, aunque sus inquietudes son parecidas. Una de ellas está prometida al hijo de un magnate de la lana, la otra se casará con un granjero, aunque ninguna de ellas conoce a sus  futuros esposos. 

   Durante la travesía en el barco, que durará tres meses, tendrán tiempo de conocerse y forjar una amistad que las unirá para siempre. Con ellas viajan también unas huérfanas que serán colocadas en las casas de varias familias inglesas que ya viven allí. Cada una tendrá un final diferente, no para todas la vida será fácil, pero la sencillez con la que se presentan sus vivencias, sin carecer de detalles pero sin ahondar en lo escabroso, permiten al lector vislumbrar lo que será de ellas sin ahogarse en el camino.

   Pese a sus casi 750 páginas me he soprendido con la agilidad de su lectura. Sus múltiples historias te enganchan desde el primer momento, te transpasan, empatizas enseguida con sus dos protagonistas principales, aunque se presentan muchos más personajes que tendrán su peso durante toda su vida.

   Pero si ya la vida de sus protagonistas, Gwyneira y Helen, se presenta minuciosamente elaborada y muy bien trabajada, en lo que a literatura se refiere, el contexto histórico se perfila sutilmente entre sus páginas, enseñándonos una época precisa en la que nos presentan también esa Nueva Zelanda y las relaciones existentes con los maoríes.

   La parte histórica es bastante fiel a los acontecimientos, acercándonos a los orígenes de los indígenas de forma muy documentada. No me pilló nada de sorpresa, puesto que es un tema en el que estuve interesada hace un par de años y leí bastante sobre la cultura maorí, su llegada a Nueva Zelanda y sus propias creencias. Todo ello me vino a la mente mientras leía este precioso libro.

   Evidentemente he disfrutado con su lectura, puesto que toca muchos temas y no cae en la cursilería ni en los típicos modelos de "folletines". La historia se sostiene siempre, los personajes siguen su evolución lógica, si bien todos esperamos que la parte romántica también se haga palpable, y en eso tampoco nos defrauda. La brillantez de sus diálogos nos adentran en el Londres del siglo XIX y los choques culturales que, sobre todo Helen, encuentra en su nuevo destino.

    Hay momentos de gran impotencia, el ser mujer en una época determinada era sinónimo de obediencia, aunque, a decir verdad, el ser hijo tampoco es que tuviese grandes ventajas, y eso se transcribe en sus páginas de forma real y directa. Claro que cuando se vive en la creencia de que eso es lo normal, aunque no siempre justo, se puede ser feliz aceptando su lugar. De ahí que las mujeres no se hundiesen en la miseria.

   Solo me puedo "quejar" ante un final algo precipitado, a mi entender, al que un capítulo más no le hubiese cargado en demasía. Es una historia que termina, todos los personajes tienen su hueco, la escritora no se olvida de ninguno, pero con "encuentros" se podrían haber recreado un poco más. Claro que es solo mi percepción, el de una lectora a la que le ha dado una gran pena llegar al final del camino, aunque, para ser sincera, no se si tendré cuerpo de seguir con los otros dos títulos.

domingo, 13 de enero de 2013

Proyecto AC7



Leí este libro, Proyecto AC7,  hace ya bastantes semanas. Realmente me pareció bastante entretenido y con giros estupendos, que hicieron me mantuviese en alerta durante toda la historia.

Sin pretender desvelar demasiados datos comentaré que desde el principio te encuentras tan perdido como su, llamémoslo, protagonista. Al menos esa era mi impresión. Y creo que es importante este dato, dado que como si de él se tratase, puedes ir "descubriendo" poco a poco de que va todo ese misterio que le rodea.

No deja de ser una obra de ficción, pero que intenta presentar una posible realidad futurista, en la que no sabes realmente que bando lleva más razón. Pese a que este género no es el que más me apasiona, reconozco que esta historia me enganchó de principio a fin, ...sobre todo ese final.

Hubo momentos en los que me sentí algo noqueada, tremendamente bueno desde mi punto de vista, puesto que me gustan las historias que puedan sorprenderme y que hagan que mis "suposiciones" no se cumplan. Creo que es el elemento imprescindible para no bajar la guardia durante su lectura. 

Si bien es cierto que, en ocasiones, los personajes no parecen perfilarse del todo, es una consecución lógica de la propia historia, puesto que si todo se va desarrollando desde la perspectiva de su protagonista, me resultaría muy complejo de creer otro tipo de "presentación" más compleja. Desvelaría gran parte de su trama antes de tiempo.

Opino que Igor Hernández se presenta como un autor al que no hay que perder de vista.     

martes, 8 de enero de 2013

Estación Orichalcum



Escribir esta entrada está siendo todo un reto. Terminé la lectura de "Estación Orichalcum" hace días, pero no encuentro el momento preciso de enfrentarme a esta hoja en blanco y poder transmitir la mínima parte de lo que este título me parece. Quizá sea porque siento total indignación ante la idea de ver editados otros libros de muchísima menor categoría, claro que sus afamados autores deben de pesar mucho más, y no entiendo como ninguna editorial se ha decantado ya por toda esta revelación literaria, Gabri Ródenas y su mundo. O quizá, porque sencillamente no soy capaz de transmitir nada tras el impacto de su lectura.

Superadas estas pequeñas trabas, que en nada tienen que ver con la historia, no me queda de otra que lanzarme de lleno en esta modesta reseña.

No me gusta la idea de desvelar demasiados datos, porque tampoco me gustaría quitar emoción  a su anterior novela "El búnker de N", dado que podría decirse que Estación Orichalcum es su "secuela". Andarse con pies de plomo, en este terreno, es tremendamente complejo. Habrá aún muchas personas que no la hayan leído, craso error opino, pero por si las moscas...

Tras adentrarme en esa magnífica obra, su búnker,  vislumbrar un final que en nada tuvo que ver con la realidad (aunque a mi favor diré que el mío era bastante más impactante ;-D), y tras comentarlo con el propio autor, no puedo más que admitir que no las tenía todas conmigo con  su segundo libro. Sabía de sobra que me gustaría, dado que el estilo que muestra en sus escritos es, sencillamente, fabuloso e irrepetible. Pero continuar con ciertos personajes, tras lo vivido, podría ser bastante complejo de hilar.

Pero eso solo pasa en cabecitas mundanales como la mía, para autores de la talla de Gabri es un sencillo contratiempo que salvamos con un final y comienzo dignos del más puro estilo "Rodenil". Y es que, tras leer el primer capítulo, disfrutarlo, reir y descubrir el sello personal del autor, no cabe otra palabreja en mi vocabulario. Guiño inofensivo y con todo el respeto que se merece.

Una historia real, puesto que opino que no va en nada desencaminado, presentada tan sutilmente que cuando quieres darte cuenta estás metido hasta el cuello. Y pienso, ¿podré salir?  

Pero Gabri ya nos advierte al principio, es una historia con final abierto, en el que cada uno de nosotros podremos hacer que cambie, según nuestro mundo, nuestra manera de pensar y, lo más importante, nuestra manera de actuar.

Un consejo, leer el libro con un mp4 o similar al lado. No son pocas las recomendaciones musicales en el libro, que te introducen (más si cabe) en esta intrigante historia. La vena melómana del autor no pasa desapercibida, y apuntarse unos buenos títulos a leer (para todo aquel que no lo haya hecho ya), imprescindibles para todo amante de este género. 

En cuanto a su forma de mostrarnos su visión peculiar, no puedo más que decir que pocos autores me enganchan tanto. Escribe de manera fluida, amena, directa, pero no por ello pierde el glamour innato en él. Llega a todos, independientemente de los gustos y edad. Evidentemente hay datos complejos, giros inesperados (no sería él claro) y reseñas a personajes de su primera novela (esta parte me encanta).

Que ha crecido como escritor, salta a la vista. Si su primera obra me pareció estupenda, esta ha superado con creces mis espectativas. Las relaciones continúan de forma lógica y los personajes pueden palparse, como si de personas reales se tratase. Porque pese a lo "imaginativo" de la trama, no olvidemos que la fuerza real la aportan los integrantes de la misma.

¿Tengo que evaluarla finalmente?, creo que no le pondré un calificativo único, puesto que encasillar a las obras, y de paso a sus autores, no va conmigo. Me gusta la libertad y amplitud de miras, así que lo denominaré sencillamente como best seller atemporal, eso sí, de una gran calidad indiscutible.