miércoles, 28 de agosto de 2013

Adolf Hitler, su gran secreto


   A comienzos de verano me apetecía seguir leyendo literatura histórica. Como tengo cantidades ingentes de libros en el e-book, no quiero ni contarlos para evitar asustarme, me paré en el primero que encontré. Realmente no recuerdo cuándo adquirí este ejemplar sobre Adolf Hitler de Javier Ramirez Viera, algo que tampoco viene mucho al caso, sencillamente resultó la primera opción.

   ¿Qué puedo decir de él?, pues que personalmente me ha resultado bastante interesante. Quizá porque no se llena de detalles que no sería capaz de asimilar, aunque admito que puede quedarse muy corto. Un libro sobre este personaje daría para muchísimo más, pero sí nos sirve para tener un acercamiento, de manera controlada, hacia esa figura tan representativa a la par que "odiada".

   Aunque no me ha desvelado nada que yo no supiera, sobre su personalidad,  sigo pensando que un análisis, aunque sea bastante sencillo, sobre ciertas situaciones, o momentos históricos, deben ser siempre bien recibidos. Quizá por eso me ha gustado este libro, por su sencillez, aunque representando una realidad que, en este caso, superaba con creces la ficción.

   La parte con la que me quedo es sobre los supuestos fenómenos OVNI, más relacionados con los avances aeronáuticos de toda la camarilla del Führer, que con marcianitos verdes venidos de más allá de nuestra galaxia. Javier nos expone magistralmente toda una serie de situaciones que fueron aprovechadas para seguir manteniendo a la población en su acostumbrada ignorancia.

   En cuanto a la Segunda Guerra Mundial, la obra muestra otra posible cara de la moneda, quizá fue sólo el destino, una mala jugada estratégica, un desenlace inesperado para todos, una manipulación general desde otros países,... Como veréis la historia nunca ha sido lo mío, mi pasión eran las ciencias naturales, así que reconozco que gracias a este título he despertado las ganas de saber un poco más.

   No puedo valorarlo como lo hago con las novelas, puesto que no se hasta que punto refleja toda la realidad o está solo basado en suposiciones personales, muy respetables también, de su autor. Aunque personalmente me ha parecido bastante ilustrativo, no me aventuro a recomendarlo como la "gran revelación" del verano, aunque si sigo indagando por otros lados, quién sabe, quizá tenga que retomar la reseña.

sábado, 10 de agosto de 2013

El Sr. Poiccard y yo

 
  No se si alguien en la sala falta por enterarse de que bebo los vientos por el señor Poiccard. ¿Quién es él?, pues yo lo considero el "alter ego" del no menos cautivador (en lo que a letra escrita se refiere) Gabri Ródenas. Lo admito,  se me ve demasiado el plumero, pero que se le va a hacer, ciertos canallas me tienen ganada.

   Le conocí en "El Búnker de Noé", vivimos una historia intensa, con altibajos, no carente de ingeniosos momentos y siempre con la intriga compartiendo mi almohada. Tras esta idílica y emocionante aventura, de las que una tiene pocas en la vida, pensé que todo se había acabado entre nosotros. El fin se palpaba y mi imaginación resolvió el resto, a mi manera claro está. Pero el destino me guardaba otro final, siempre de la mano de su, no menos, inquietante artífice. 

   De ahí mi buena estrella al volver a encontrarme, de nuevo, con el Sr. Poiccard. Esta vez en otras circunstancias,  a priori más exótica, pero que se volvió tremendamente conspiradora a la par que realista. ¿No sabéis aún qué pasó en la "Estación Orichalcum"?, pues algo realmente inquietante, visionario diría yo, pero no exento de un riesgo real que nadie alcanza a vislumbrar dada la cantidad de adictos a la red que crece por día. Y hasta ahí puedo contar, podriamos llamarlo el secreto de mi alcoba.

   Y tras esta última aventura vivida con mi adictivo "compañero", debo reconocer que los celos en esta relación están fuera de lugar. Es más, yo diría incluso que disfruto mucho más al saberlo compartido, ¡quién me lo iba a decir!, y ¡claro que el anzuelo es él!, desde mi punto de vista, pero todo lo que le rodea tiene los ingredientes perfectos para convertirse en ese gran Best Seller que sus incondicionales  deseamos ver, ¡YA!, en ese otro formato menos digitalizado.

Gabri, ¡va por ti!