No puedo dejar de recomendar este libro de Emili Teixidor,, la amiga más amiga de la hormiga Miga. A mi entender no tiene edad, pero trae consigo un mensaje impresionante. Puedes leerlo desde muchos puntos de vista y sacar mil y una conclusiones.
Me hice con él hace ya más de tres años, y creo que he sido yo (la adulta) la que más lo ha releído. Pasó que, buscando información de otro libro, encontré por casualidad una reseña de él en la red. Me impactó tanto el comentario de la persona que lo escribió, que no me quedó más remedio que buscarlo.
Entiendo que mi hijo no estaba del todo preparado para entenderlo, pero aún así sacamos conclusiones muy valiosas. Porque pese a todo lo que lleva dentro, está escrito en un leguaje sencillo y ameno. Por lo que es fácilmente legible.
Una hormiga que quiere ver más allá de lo que su pequeña vista alcanza. Quiere ver mundo, pese a los obstáculos que sus congéneres le plantean. Pero gracias a sus amigos, de otras especies claro, es capaz de cumplir su sueño.
Siempre me fijo mucho en la forma de decir las cosas, es lo que realmente me impacta y crean esa necesidad de tener o no un libro. En este libro descubro, cada vez que lo leo, otra cosita más que me hace pensar y reflexionar sobre un montón de cosas. Es de los que tienes que leer cada vez que pasas una etapa de tu vida diferente, porque según como te encuentres, tendrás una visión distinta de su mensaje.
Unas explicaciones sencillas, pero llenas de verdad. La importancia real que se merecen nuestros propios descubrimientos, anque para otros sean una tontería o algo corriente, ese hallazgo que nos abre los ojos, que significa algo en nuestra vida, debe bastarnos para crecer como personas y desarrollar nuestro propio criterio y creencias.
Todo el libro está repleto de frases impactantes, al menos para mí a sido así, en una historia sincera relatada a modo de cuento.
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